Alergia al trigo: cuando este cereal nos hace mal
Si la ingesta de alimentos que contienen trigo provoca síntomas en el tracto gastrointestinal o si la piel reacciona con picores y erupciones agónicas, la causa puede ser una alergia alimentaria al trigo.
¿Qué es la alergia al trigo?
La alergia al trigo como tal debe diferenciarse de la intolerancia al gluten o de la alergia al polen.
Tras la ingestión, los componentes proteínicos propios del trigo (albúmina y globulinas, tal como se encuentran en la cáscara exterior del grano, o gluten [proteína del gluten] en el endospermo) desencadenan una reacción del sistema inmunitario.
Éste reconoce la proteína del trigo en el intestino como un supuesto enemigo al que hay que combatir. Se forman anticuerpos, lo que da lugar a procesos inflamatorios. En cierto sentido, el sistema inmunitario se vuelve contra sí mismo, debido a un despiste.
Por lo general, las reacciones alérgicas aparecen inmediatamente después de comer trigo, pero también pueden tardar unas horas o aparecer, como reacciones tardías, entre 24 y 48 horas después del contacto con el alérgeno.
Los síntomas de la reacción inmunológica pueden variar en gravedad.
El trigo se considera muy alergénico y, por lo tanto, es un desencadenante relativamente frecuente de una alergia. Por ejemplo, también se conoce la llamada «alergia del panadero», en la que el asma o la rinitis crónica pueden desencadenarse por la inhalación de polvo de harina.
Las alergias al trigo son más frecuentes en niños que en adultos.
Esto también se debe al hecho de que este tipo de alergia también puede desarrollarse en niños (por ejemplo, a medida que madura el sistema inmunitario). Si la alergia sólo aparece en la edad adulta (a menudo debido a cambios hormonales o similares), existe una alta probabilidad de que persista.
¿Cómo se manifiesta la alergia al trigo?
Los síntomas de una alergia al trigo son variados y dependen también de la edad de la persona afectada.
Mientras que los bebés y los niños muestran más reacciones cutáneas, por ejemplo, los síntomas digestivos son más frecuentes en los adultos. El momento de aparición de los síntomas también puede variar.
Los signos más comunes de una alergia al trigo:
- Dolor abdominal
- Flatulencia
- Diarrea (consejos útiles para la diarrea)
- Náuseas/vómitos
- Acidez, eructos
- Cansancio, fatiga
- Deficiencia de nutrientes (especialmente con diarrea persistente)
- Reacciones cutáneas como erupciones, habones y picores
Causas de la intolerancia al trigo
Como se ha mencionado al principio, los componentes proteínicos del trigo desencadenan una reacción inmunitaria (alergia).
Las causas exactas de las alergias aún no se conocen del todo científicamente.
Lo que es seguro es que influye un componente genético. Los hijos de alérgicos tienen muchas más probabilidades de desarrollar alergias ellos mismos.
¿Cómo se diagnostica la alergia al trigo?
En los niños, la alergia al trigo suele reconocerse rápidamente, ya que los síntomas suelen manifestarse con bastante intensidad en forma de alteraciones cutáneas (erupciones, etc.), lo que hace que las pruebas de alergia parezcan evidentes.
Si se produce una alergia al trigo en adultos, los síntomas en el tracto gastrointestinal tienden a ser los protagonistas. Pueden no aparecer hasta varias horas después de haber ingerido alimentos que contengan trigo.
En cualquier caso, es importante diferenciar la alergia de toda una serie de intolerancias alimentarias.
La alergia al trigo se confunde a menudo con la enfermedad celíaca en particular, lo que significa que los enfoques de tratamiento también se confunden. En el caso de la enfermedad celíaca, por ejemplo, deben evitarse varios tipos de cereales, mientras que los productos sin gluten sí pueden provocar síntomas de alergia al trigo, ya que se les puede añadir almidón de trigo.
Llevar un diario de los síntomas y descartar otras intolerancias es el primer paso hacia un diagnóstico correcto.
Éste se determina en última instancia mediante un análisis de sangre. La alergia al trigo se confirma por la presencia de anticuerpos específicos contra las proteínas del trigo.
Opciones terapéuticas
Desgraciadamente, la alergia al trigo todavía no tiene cura. Esto significa que la terapia farmacológica no es posible. El único tratamiento eficaz consiste en evitar estrictamente los alimentos que contengan trigo.
También deben evitarse los cereales similares al trigo (espelta, kamut, einkorn, espelta verde).
Como el trigo es uno de los tipos de cereales más populares y se cultiva en grandes cantidades en todo el mundo, está presente en muchos productos. Otro aspecto delicado es que a menudo se utiliza como aglutinante o portador de aromas.
Esto significa que el trigo también puede aparecer en alimentos que, aparentemente, no contienen trigo (salchichas, sopas de sobre, fruta confitada, etc.).
En cualquier caso, es aconsejable buscar asesoramiento nutricional para tener una idea de lo que se puede comer sin remordimientos y de lo que se debe comer con precaución.
Si tienes alergia al trigo, debes evitar los siguientes alimentos o comprobar minuciosamente los ingredientes:
- Diversos tipos de pan y bollería
- Alimentos infantiles
- Tartas, pasteles y otros dulces
- Pasta
- Albóndigas
- Productos cárnicos y embutidos
- Pescado empanado
- Sopas preparadas y cubitos de sopa
- Salsas y especias/mezclas de especias
- Varios productos precocinados (platos de verduras precocinados, puré de patatas para mezclar, etc.)
- Aperitivos como patatas fritas
- Cerveza de trigo
- Barritas variadas de chocolate y muesli, helados, chocolate para beber
Afortunadamente, si es alérgico al trigo, existe toda una gama de otros cereales que pueden incorporarse fácilmente a su dieta para sustituirlo:
- Trigo sarraceno
- Centeno
- Maíz
- Cebada
- Avena
- Mijo
(Atención: pueden producirse reacciones cruzadas con la cebada, la avena y el centeno)
También se comercializan harinas alternativas para cocinar y hornear:
- Goma garrofín
- Harina de plátano
- Harina de soja
- Harina de patata
- Harina de arroz
- Harina de castaña